Ir al contenido principal

Destacados

Eterno en las Sombras del Tiempo. Parte I.

En las profundidades de una cueva olvidada en las montañas de los Andes, donde el viento susurra lamentos que ni los dioses han oído, yace el hombre que desafía al tiempo mismo. Su nombre, si es que alguna vez lo tuvo, se perdió en las arenas del olvido hace eones. En muchas épocas tenia por nombre  El Errante,  pero él se hace llamar Kairos, un eco de la antigua palabra griega para el momento oportuno. Porque en sus 50 millones de años de existencia, ha aprendido que el tiempo no es un río lineal, sino un laberinto de instantes robados y eras devoradas por el silencio. K airos no envejece. Su piel, tersa como la de un niño pero marcada por cicatrices invisibles —huellas de glaciaciones, erupciones volcánicas y guerras que borraron civilizaciones enteras—, brilla bajo la luz mortecina de su refugio. Sus ojos, dos pozos negros salpicados de estrellas extinguidas, han visto el nacimiento de los primeros homínidos en las sabanas africanas, cuando el sol era más joven y el aire ol...

Africa: reflejo de la podredumbre humana

Puedén imaginar mis queridos lectores que millones de personas  mueren por falta de alimento? Pueden imaginar que hay un puñado de personas cuyas fortunas superan el PIB de muchos países pobres. Bastaría un poco de voluntad humana de todas las naciones para no ver estas horribles escenas. La verdad de este mundo es horrible algunas veces. Pero el espíritu humano es más poderoso y siempre busca esperanza.
África y su eterna hambre de esperanza

Comentarios

Entradas populares