El pirata informático británico Gary McKinnon falla en su último intento legal para evitar su extradición a los EE.UU., donde podría enfrentar una pena de hasta 60 años en una prisión de alta seguridad
Gary McKinnon admite haber penetrado en las computadoras militares de EE.UU.
El alto tribunal desestimó dos solicitudes de revisión judicial. Para a familia McKinnon y los partidarios del hacker fue muy desalentador el comunicado. Janis Sharp, su madre, dijo: "Tenemos el corazón roto. Si la ley dice que destruir la vida de alguien es justo, entonces es una mala ley".
Los abogados de McKinnon dijeron que apelarán la decisión, mientras que su madre le pidio a Barack Obama a intervenir.
De pie frente a los tribunales, Sharp pronunció un discurso directo al presidente de los EE.UU.. "Esperamos hacer de este mundo un lugar mejor, un lugar más compasivo", dijo.
"Obama no lo desea. Él no quiere que el primer individuo extraditado por el mal uso de ordenador sea un chico autista y fanatico de los platillos voladores (ovni). Él no quiere esto".
El alto tribunal resolvió confirmar la negativa de Keir Starmer, el Director del Ministerio Público, para autorizar una serie de pruebas al fanatico de los platillos voladores de 43 años en Gran Bretaña.
También dictaminó que el ex ministro del Interior, Jacqui Smith, había tenido en cuenta la enfermedad de autismo del señor McKinnon a la hora de considerar la solicitud de extradición de EE.UU.
Los abogados de McKinnon habían argumentado que la extradición podría conducir a "consecuencias desastrosas" para su salud, incluida la posible psicosis y suicidio.
En la pagina número 41 de la decisión, según despacho legal Lord Justice Stanley Burnton and Mr Justice Wilkie dice que la desicion de la extradicion era "una respuesta legítima y proporcionada a su ofensiva".
El ministro del Interior, Alan Johnson, dijo que acatará el fallo. "Sería ilegal que detenga la extradición de Gary McKinnon, ya que la decisión del tribunal fue bien clara", dijo.
"El señor McKinnon está acusado de delitos graves y los EE.UU. tiene el legítimo derecho de pedir su extradición, como lo hacemos cuando queremos perseguir a las personas que violan nuestras leyes".
Añadió que estaba abierta a McKinnon cualquier vía para tratar de apelar a la Cámara de los Lores.
El abogado de McKinnon, Karen Todner, dijo que iba a presentar un recurso contra la decisión dentro de 28 días y, si es posible, llevarlo a la Corte Suprema de nuevo e incluso a Europa.
Sin un recurso legal se deberá esperar para una fecha posterior. Burnton dijo que era una cuestión que debe abordarse con "lo más rápidamente posible", probablemente en septiembre.
Todner describió la decisión como "muy decepcionante", pero ella dijo que el equipo jurídico no va a darse por vencido. "Alan Johnson todavía tiene el poder de actuar. Tenemos 28 días para revisar la sentencia y vamos a seguir explorando todas las vías legales hasta lograr un resultado justo y apropiado".
Después de la decisión, Sharp dijo: "Nuestra esperanza sigue estando con el gobierno. ¿Qué pruebas necesita Gordon Brown y Alan Johnson para entender lo que la extradición le hará a Gary, por no hablar de nosotros?
"Gary no va a sobrevivir y no quisiera ver a mi hijo otra vez. Todo para complacer a los americanos? Si el caso de Gerardo fue un crimen tan terrible, que debería haber sido juzgado y condenado aquí hace años.
McKinnon ha admitido la intrusión en los sistemas informáticos del departamento de defensa de EE.UU. y de la NASA, pero sus partidarios dijeron que sus obsesiones lo llevaron a realizar actividades equivocadas de piratería en su apartamento de Wood Green, al norte de Londres, y que debía ser juzgado en Gran Bretaña.
La campaña Free Gary (liberen a gary) ha ganado el apoyo de más de 100 miembros del Parlamento y recibió el apoyo ruidoso del Daily Mail y celebridades como como Bob Geldof, Chrissie Hynde, Barry Norman, Jilly Cooper y Julie Christie.
El revisor independiente del gobierno de la legislación antiterrorista, Lord Carlile, intervino para decir que persecución de McKinnon en los EE.UU. sería "cruel e inmoral", debido a su condición médica.
La esposa de Gordon Brown, Sarah, conoció a la madre de McKinnon para expresar su preocupación, mientras que el Primer Ministro la semana pasada dijo: "Cualquiera que vea esto se debe simpatizar con alguien que sufre de síndrome de Asperger (autismo)."
McKinnon admitió la intrusión en las 97 computadoras, dejando un mensaje en los sistemas militares de EE.UU. diciendo: "Voy a seguir para interrumpir".
El gobierno de EE.UU. dijo que las reparaciones cuestan $ 700.000 (£ 430,000) y la Fiscalia que lleva el caso dijo que las actividades de piratería no fueron al azar, sino un esfuerzo deliberado para violar los sistemas de defensa de los EE.UU. en 2001-02.
McKinnon no impugnó la decisión de Starmer para llevarlo a juicio en Gran Bretaña. El hacker sostuvo que la extradición podría tener consecuencias desastrosas, incluyendo la psicosis posible y el suicidio debido a su estado de salud como enfermo autista.
McKinnon ha hablado de sus temores, diciendo que él se despierta cada mañana y dice: " sentirse como si alguien le ha tenido un martillo sobre mi pecho durante toda la noche".
Sus abogados argumentan que no hay equilibrio entre los acuerdos de extradición entre el Reino Unido y los EE.UU. Las cifras publicadas de extraditados dadas a conocer por el Partido Liberal Demócrata, en respuesta a las preguntas parlamentarias revelan el doble de los presuntos delincuentes a los EE.UU. en comparación a los que han sido enviados a Gran Bretaña.
Los ciudadanos sospechosos en los EE.UU. tienen un 20% menos de probabilidades de ser extraditados comparados a los que viven en Gran Bretaña. Los críticos dicen que esto indica que los británicos poseen un "estatus de segunda clase" cuando se trata de ser enviado a juicio en los EE.UU.
Que esto sea un ejemplo para todos los incautos que tratan de vulnerar sistemas de computo...hay ojos invisibles...y manos de ley...que tarde o temprano ejercerán justicia.¡¡
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